La Permanente no descansa. Ya está fijada la fecha para la celebración de la IV Cata Guasona del Vino, 17 y 18 de noviembre, y ahora hemos realizado el reparto de tareas. Quedán muchas cosas por hacer en poco más de mes y medio. Cada uno tiene ya su misión encomendada. Claro está que los hermanos que no acuden a las reuniones de la permanente podrán aportar su colaboración si lo desean. Incluso será bienvenida.
Se ha establecido un numerus clausus para la celebración de esta Cata. El número es de 13. No podrán participar más botellas en la Cata. Este número responde a los doce hermanos guasones (como los apóstoles) más un hueco para amigos de la Guasonería. En cualquier caso, las plazas que no ocupen los hermanos guasones podrán recaer en otros amigos guasones.
Las juezas de las III edición han sido nombradas también para esta edición y de paso de manera vitalicia. Siempre que ellas no digan lo contrario, claro. En la última reunión volvió a valorarse su imparcialidad y su profesionalidad en la organización de la Cata.
El hermano Miliki volvió a ser ratificado como contable de la Cata. Esta es una afirmación de perogrullo, pero no obstante, debe quedar constancia de ello. En el reparto de tareas, el hermano Miliki y el hermano Loco, se encargarán de las tareas de intendencia, incluyendo la compra de hielo.
El hermano Chincheta y el hermano Pepote tienen la encomienda de encontrar una ubicación para la celebración de la cata. Además deberán llevar adelante la dura tarea de ejercer como recaudadores, es decir, obtener el dinero de los hermanos para los gastos previos, tales como alquiler anticipado, compra de premios y parte del abastecimiento líquido y sólido. En breve se comunicará a los hermanos la cantidad establecida.
Por último el hermano Candela y el hermano Largo serán los encargados de los premios y de la creación de un ambiente apropiado para la celebración de la cata (velas, ...) También deberán adquirir los decantadores que permitirán el cambio de sistema previsto para esta edición.
Se ha establecido una duración de tres horas para la cata. Los vinos estarán decantados y cada participante podrá degustar el que desee una sóla vez y con la medida que se dispondrá al efecto. La hora de inicio de la cata prevista inicialmente son las 13:00 horas del sábado 17 de noviembre. No obstante, en este punto se adoptó la decisión de ser flexibles, en función de las necesidades de los participantes. Previamente las juezas darán fe de la propiedad de cada botella, sortearán el orden y númerarán tanto la botella como el decantador.
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